Los estores confeccionados a medida han cobrado un gran protagonismo en la decoración de nuestros hogares. Especialmente pensados en principio para habitaciones juveniles, despachos y habitaciones de niños, poco a poco han ido invadiendo todos los rincones de la casa.

La decoración de ventanas con estores se ha impuesto también en habitaciones pequeñas debido a que su elegante sencillez ocupa menos sitio, sobre todo a la vista, que las cortinas. También se han impuesto en estancias con poca luz. Debido a que el visillo va liso, sin pliegues, se gana en trasparencia y luminosidad.

Una de las opciones que tenemos que escoger a la hora de diseñar nuestro estor confeccionado a medida, es el tipo de mecanismo. Existen básicamente tres tipos:

Los mecanismos con cordón

Reúnen las cuerdas que suben y bajan el estor, pasándolas a lo largo del riel superior, en una pieza que se llama freno. Desde el freno bajan todas juntas para que podamos tirar de ellas. Cuando el estor está a la altura deseada se llevan las cuerdas hacia delante, o hacia un lado, depende del modelo, el freno actúa y el estor se queda en el punto fijado.

Mecanismo de cordón lapa

Es igual que el anterior pero no se atornilla. Está pensado para cuando se pone el estor directamente en la hoja de la ventana. En estos casos si no se quiere atornillar para no estropear el cerco, se puede poner este mecanismo directamente con una cinta adhesiva doble cara especial, que lo deja pegado y bien sujeto directamente al cerco de nuestra ventana.

Los mecanismos de cadena

En este caso los cordones accionan el estor se enrollan en unos carretes que hay en el riel superior. Todos los carretes, uno por cordón, están unidos con una varilla que está unida a un mecanismo del que cuelga una cadena con bolitas. Tirando de la cadena gira la varilla y todos los carretes desenrollan o enrollan todos los cordones a la vez. Cuando dejamos de tirar de la cadena el estor se para dónde queremos, sin más.

El mecanismo de cadena es ligeramente más caro que el de cordón, pero tiene varias ventajas. La primera es su facilidad de manejo, este mecanismo siempre sube y baja el estor completamente horizontal. Con el mecanismo de cordón, sobre todo con el paso del tiempo, cuando los cordones o el freno se van desgastando, a veces se frena más una cuerda que otra y es estor queda torcido. En este caso hay que buscar la cuerda que ha subido menos y tirar un poco de ella para nivelar. 

La segunda ventaja tiene que ver con la mayor facilidad para desmontar y montar el estor para lavarlo. En este caso las cuerdas siempre están en su sitio. En un estor de cordón, cuando se desmonta se corre el riesgo de que las cuerdas se deslicen y se cuelen por el freno. Volver a montar las cuerdas de un estor correctamente no es tarea fácil si no se hace con frecuencia.

Con el mecanismo de estor de cadena sólo hay que tener en cuenta a la hora de volver a montar el estor, de que los cordones se aten a la misma altura, lo cual es muy fácil si se hace con el estor completamente estirado. De esta forma, siempre subirá y bajará completamente vertical.

Hay varios tipos de mecanismos de cadena, sin grandes diferencias entre si. Nosotros, a la hora de confeccionar un estor a medida, utilizamos un modelo que se llama mecanismo compacto, donde los carretes, varilla y mecanismo están integrados dentro de un cajoncito de aluminio, quedando todo oculto a la vista.

Es importante saber a la hora de escoger el mecanismo para nuestro estor, que estéticamente da lo mismo. Cuando pegamos el visillo ya confeccionado con el velcro al carril superior, el tejido debe tapar todo el mecanismo de forma que nos se vea. Eso sí, en el estor de cordón este se queda oculto por la tela y en el mecanismo de cadena, esta se queda vista en un lateral de nuestro estor.

Ahora ya puedes elegir tu estor. ¿Lo vas a hacer Hoy?